El Palacio de Congresos acoge la celebración de las IX Jornadas Regionales sobre Celíacos

Lunes, 11 abril 2011
La enfermedad celíaca afecta a 300 familias en la provincia

El precio de los productos sin gluten es hasta doce veces más elevado que el de los alimentos “normales”. Por lo que, los afectados pueden acceder a una ayuda de 300 euros anuales, que concede el Gobierno de Castilla-La Mancha

La Asociación de Celiacos de Castilla-La Mancha (ACCLM) celebró durante el día de ayer las IX Jornadas Regionales sobre Enfermedad Celíaca en el Palacio de Congresos de Albacete, donde su  presidente,  Fernando Pozuelo Espinosa, explicó que dicha patología es una intolerancia al gluten, unas proteínas que se encuentran en el trigo, la cebada y el centeno, de forma que el epitelio del intestino delgado se daña afectando a la absorción de los alimentos.

Antes de que comenzarán ponencias como la de la doctora Elena Balmaseda sobre Nuevas estrategias terapéuticas, la dietista Verónica Reolid sobre Aspectos nutricionales en la dieta sin gluten, o la explicación sobre los inconvenientes que un celíaco encuentra fuera de casa, de manos de Jon Zabala, presidente de Face Joven; el presidente de ACCLM  calificó de “convivencia” estas jornadas, en las que también se repartieron productos sin gluten entre los asistentes.

En Albacete, la base de datos de esta asociación tiene registradas a unas 300 familias, “pero en cada una puede haber un, dos o tres celíacos”, especificó Pozuelo Espinosa, quien también contabilizó las 1.260 familias que viven en toda Castilla-La Mancha.

En total, en España hay unos 30.000 casos de personas celiacas que han sido diagnosticadas. Por lo que, “se cree que es el un por ciento de todos los nacidos vivos”, señaló; al tiempo que aclaró las “muchas” dificultades a las que deben de hacer frente estos enfermos. Entre ellas, matizó que “cuando un celiaco sale de casa ya es un mundo, porque se pregunta dónde voy a ir a comer, me intoxicaré en el restaurante”.
De ahí, que la asociación hay emprendido una campaña gratuita para que cualquier restaurante pueda aprender a realizar una dieta sin gluten, “aunque nadie se apunta”, lamentó, “por lo que siempre tienes que estar pidiendo el favor a los cocineros y que te lo quieran hacer”.


Respecto a la diferencia de precios entre los productos alimentarios que incluye gluten y los que no, se baraja que estos últimos pueden ser diez o doce veces más caros. Así, Pozuelo Espinosa puso un ejemplo muy claro “si en Albacete la barra de pan está a 20 céntimos de euro, a un celiaco media barra le cuesta casi 3 euros. Un kilo de harina a nosotros nos vale 5 o 6 euros, o el pan de sandwich puede alcanzar 7 u 8 euros”. De hecho, el presidente de ACCLM no dudo en asegurar que el gasto anual en la cesta de la compra de una familia celiaca rebasa en 3.000 euros el de una familia que no padezca esta enfermedad. “Cuando hay un celiaco ya se cocina para toda la familia igual, porque es muy fácil que haya equívocos”, matizó. Respecto a las ayudas a las que pueden acceder las 300 familias celiacas de la provincia de Albacete y las más de 1.200 de toda la región, el presidente de ACCLM aclaró que reciben 300 euros anuales por parte de la Junta de Comunidades. Sin embargo, a excepción de Navarra, donde también tienen asignada una cuantía económica, y Valencia, que ofrece productos sin gluten gratuitos, ninguna otra región dispone de apoyo alguno.

Por su parte, la alcaldesa, Carmen Oliver, recordó que desde el Consejo de Personas con Discapacidad se han suscrito convenios, que ofrecen una ayuda de hasta 600 euros al año para la compra de alimentos con estas características. “En nuestra Feria también hubo una petición para que la asociación pudiera tener un rincón en el Recinto Ferial para informar, para sensibilizar y para poder tomar algo”. En este sentido, el presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha, Francisco Pardo, resaltó lo importante que es trabajar en varias direcciones: “En primer lugar, en tener un sistema sanitario que permita diagnosticar cada vez de manera más precoz a los enfermos celiacos, porque hay muchos que no están diagnosticados; por otra parte, el apoyo a las familias, porque el coste de los alimentos es muy alto; y también, hemos cambiado las normas europeas de etiquetado”.

FABRICANTES

Durante el transcurso de las jornadas, en las que finalmente se dieron cita unas 700 personas, también estuvieron presentes los fabricantes de productos para enfermos celíacos, que dieron a conocer su gama de alimentos entre los asistentes. De hecho, una de las afectadas incidió en la importancia de esta promoción, porque “los que viven en ciudades grandes tienen un gran variedad de productos, pero los que vivimos en poblaciones pequeñas tenemos menos opciones de conocer las casas”.